Voluntarios de Mahou San Miguel y WWF restauran el entorno del Manantial de Solán de Cabras

21/11/2016
Voluntarios de Mahou San Miguel y WWF restauran el entorno del Manantial de Solán de Cabras
Voluntarios de Mahou San Miguel y WWF restauran el entorno del Manantial de Solán de Cabras
  • La iniciativa ha implicado a más de 50 personas, entre profesionales de la compañía, sus familias y vecinos de Cañizares, Puente de Vadillos y Beteta, así como representantes de instituciones locales

  • Además de la mejora del entorno mediante la restauración con especies autóctonas, se han realizado trabajos preventivos de desbroce para reducir la vulnerabilidad de este entorno ante posibles incendios

  • La actividad da continuidad a los proyectos de restauración que Mahou San Miguel realizó en Puente de Vadillos y reafirma su compromiso con el cuidado de los entornos donde la compañía cuenta con centros.

Cuenca, 21 de noviembre de 2016.- Mahou San Miguel, compañía cervecera española líder del sector en nuestro país, ha celebrado este fin de semana una jornada de voluntariado medioambiental para mejorar la biodiversidad que rodea al manantial y centro de envasado de Solán de Cabras, situado en Beteta (Cuenca). Para ello, ha contado con la colaboración de WWF, organización que trabaja desde hace más de 50 años en la conservación de la naturaleza y con quien la compañía ha firmado un acuerdo estratégico para la protección de entornos naturales. De este modo, cerca de 45 personas  -profesionales de Solán de Cabras y sus familias, vecinos de Beteta, Cañizares y Puente de Vadillos-  junto al Alcalde de Cañizares, Julio César Bodoque y la Teniente Alcalde de Beteta, María Victoria Pérez Moreno, se han implicado en esta iniciativa en la que se ha limpiado y repoblado la zona con especies autóctonas.

Los trabajos acometidos dan continuidad a la restauración que Mahou San Miguel llevó a cabo el año pasado en la zona degradada de Puente de Vadillos, mejorando el entorno con aporte de suelo vegetal y con la plantación de especies arbóreas autóctonas.

Así, se ha llevado a cabo una actividad de revegetación que ha consistido en la sustitución de aquellos ejemplares que no sobrevivieron a la temporada estival.  En concreto, los voluntarios han llevado a cabo la reposición de 150 ejemplares de pino negral, sabina, romero, lavanda, tomillo y gayuba.  

Por otro lado, y para reducir la amenaza de grandes incendios, se han efectuado trabajos de limpieza en seis hectáreas en el Camino de la Cruz, encaminados a crear una masa arbolada abierta e irregular, menos vulnerable a los fuegos forestales.

En palabras de Beatriz Herrera, Directora de Responsabilidad Corporativa de Mahou San Miguel, “este tipo de iniciativas nos permite implicar a nuestros profesionales en el respeto y cuidado de los entornos naturales y  estrechar lazos con los vecinos de las zonas en las que se ubican nuestros centros de producción. Beteta y Puente de Vadillos son localidades de suma importancia para nuestra compañía al albergar nuestro manantial de Solán de Cabras y queremos contribuir activamente a su cuidado y desarrollo sostenible”.

Para Diana Colomina, coordinadora de Restauraciones Forestales de WWF España, “reforzar la biodiversidad en una zona con tanto valor ecológico como la Hoz de Beteta es importante para asegurar su buen estado de conservación a largo plazo. La implicación de Mahou San Miguel en esta actividad es una muestra del compromiso de la empresa con el entorno en el que desarrolla su actividad”.

Compromiso medioambiental

Tanto para Mahou San Miguel como para WWF, la restauración medioambiental es un objetivo fundamental, especialmente en entornos como en el que se ha llevado a cabo esta actividad. Beteta se encuentra en la Serranía de Cuenca, un espacio incluido dentro de la red Natura 2000. Se trata de un entorno con un gran valor ecológico, donde el río Guadiela ha dado forma a escarpes y hoces espectaculares.

Esta jornada se enmarca dentro de “Juntos por el Planeta”,  un acuerdo estratégico a tres años que Mahou San Miguel firmó con WWF en noviembre 2015 con el objetivo de trabajar de forma conjunta en proyectos de conservación ambiental. Con él, la compañía refuerza su compromiso con el medio ambiente y reafirma su objetivo de ser la empresa con menor huella ambiental del sector cervecero en 2020.

Como muestra de dicho compromiso, en 2015, Mahou San Miguel invirtió más de 3,7 millones de euros para garantizar su óptimo comportamiento medioambiental. Gracias a este esfuerzo, a pesar de haber aumentado su producción en un 48% desde 2000, ha reducido un 39% su consumo de agua, un 46% su consumo de energía y un 46% sus emisiones. En la actualidad, el 99,5% de sus residuos son revalorizados.

Además, Mahou San Miguel colabora activamente con distintas iniciativas que tratan de minimizar el impacto de su actividad en el entorno, como The CEO Water Mandate de Naciones Unidas, para garantizar la sostenibilidad de los recursos hídricos, o el Pacto Mundial de la ONU, para extender la Responsabilidad Social a toda la cadena de suministro de la compañía.